Los países extranjeros, sus pueblos, idiomas y culturas han fascinado a Jens Debus desde su primera infancia. Lógicamente, planea escribir su primera tesis sobre «la internacionalización de la gestión de personal». Desafortunadamente, la literatura sobre el tema es insuficiente y no suscita ningún interés: el momento concibe la gestión de recursos humanos estrictamente nacional y en sus aspectos clásicos del derecho laboral, el derecho de la seguridad social, el derecho fiscal y la política de remuneración. ¿Gestión de talento transfronteriza, programas de bonificación estandarizados para ejecutivos? – ¡para nada!

Jens ha digerido desde hace mucho tiempo su decepción por la negativa de su tesis. Ahora está profesionalmente involucrado en la gestión internacional de recursos humanos. Durante una sesión en los Alpes austriacos, su coach lo compara con un piragüista involucrado en una poderosa corriente de aguas blancas: Jens ama cada inicio, cada brecha inesperada del curso del río, en los tramos difíciles y arriesgados es donde encuentra su estado más óptimo. Pero cuando el curso se une a un río más ancho y tranquilo, Jens comienza a aburrirse. Luego desciende de su canoa y va en busca de nuevas aguas turbulentas.

Diez años después, Jens se toma un descanso. Viaja en sentido contrario a las agujas del reloj a lo largo del continente africano. En nueve meses, viaja por 40 países: en autobús, automóvil, taxi, tren, bote, canoa, a pie, a nado, en bicicleta e incluso en burro. Rara vez se mueve en avión. Dirige un blog «Un tiempo fuera en África», en el que comparte su expedición y sus muchos encuentros con las poblaciones más diversas. Cae bajo el hechizo de todo un continente y sus habitantes. Esta fascinación sigue intacta hasta nuestros días.

Jens decide combinar sus dos pasiones: la del desarrollo organizacional y su amor por el continente africano. Realiza su primera prueba en la República Democrática del Congo. Parece que África ciertamente necesita médicos y técnicos, pero no solo eso.

Jens se aventura nuevamente en aguas desconocidas y crea la hr international consulting gmbh, con sede en Berlín. Sigue centrado en el área de la cooperación internacional para el desarrollo, pero no solo se limita a las fronteras de África, aunque las aguas siguen siendo turbulentas y, probablemente, durante mucho tiempo.